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En esta preparación que hemos conservado mediante la técnica de plastinación vamos a estudiar los principales componentes nerviosos que intervienen en la inervación de las estructuras cefálicas del caballo. Los nervios han sido coloreados en color amarillo, se ha representado en color rosa algunos dispositivos glandulares como es la glándula sublingual polistomática, el grupo de glándulas menores bucales dorsales y también se ha dejado representada como referencia la glándula lagrimal. En color verde se han representado algunos linfocentros como el linfocentro retrofaríngeo o el linfocentro mandibular. Vamos hacer una descripción de caudal a rostral. El medio más caudal que nos encontramos corresponde al nervio vago. Este nervio vago emite un ramo que es el nervio laríngeo craneal que se va a dividir en dos ramos: un ramo externo que va a inervar al músculo cricotiroideo y un ramo interno que es el que va a penetrar por el agujero tiroideo para recoger la sensibilidad de la mucosa laríngea. En esta preparación también estamos observando un nervio que va a impulsar a la mayoría de músculos laríngeos que es el nervio laríngeo caudal, continuación o terminación ya del nervio laríngeo recurrente. En un trayecto más dorsal y más rostral observamos este nervio que va discurriendo sobre las superficies de los músculos de la faringe de lo que es el músculo cricofaríngeo, tirofaríngeo para ir buscando la lengua ya que se trata del nervio hipogloso. Este nervio hipogloso es un nervio exclusivamente motor que va a dar una serie de ramos linguales para inervar a los músculos encargados de dar movilidad a la lengua. Por encima del músculo, perdón, del nervio hipogloso nos encontramos con un nervio pequeño que va situándose inmediatamente ventral a este borde del hueso estilohiodes y que es el nervio glosofaríngeo. El nervio glosofaríngeo, como su nombre indica, va a dar ramos para la lengua y también ramos para lo que es la faringe. Más dorsalmente encontramos el nervio de mayor tamaño que es el quinto par craneal, el nervio trigémino, concretamente su componente mandibular y de ese componente mandibular vamos a ver desprendida diferentes ramas. Desde el punto de vista de las vísceras de la cabeza nos interesa considerar este gran nervio que tenemos seccionado como consecuencia de haber retirado la mandíbula de este lado y que es el nervio alveolar inferior. Sabemos que este nervio alveolar inferior, junto con la arteria del mismo nombre, penetra por el agujero mandibular y va recogiendo la sensibilidad de la arcada dentaria inferior. En su trayecto o antes de penetrar por ese agujero mandibular emite un pequeño nervio motor que es el nervio milohioideo, ya estudiado en Anatomía I para llevar inervación motora al músculo del mismo nombre. Más dorsalmente observamos otro trayecto nervioso de gran longitud en el caballo que es el nervio lingual. Este nervio lingual es un nervio sensible que va a recoger sensibilidad de la mucosa de la lengua pero que incorpora un ramo del facial. Este ramo que se incorpora al nervio lingual se conoce con el nombre de cuerda del tímpano y es un nervio también encargado de recoger sensibilidad de tipo gustativo. En un plano más dorsal y relacionándose con el músculo buccinador, base anatómica del carrillo, nos encontramos con el nervio bucal. Este nervio bucal va a estar constituido por fibras sensibles y también fibras de naturaleza parasimpática que van a llevar inervación a estas glándulas bucales que se describían sobre el músculo buccinador. También se representa en esta preparación algunos ramos motores del nervio mandibular como son los ramos masetéricos que van contorneando la articulación temporomandibular y por último nos fijamos en esta zona correspondiente al agujero alar rostral y sabemos que en profundidad está el agujero redondo por donde surge el nervio maxilar, ramo también del nervio trigémino. Como ramos principales de este nervio vamos a destacar lo que es el nervio infraorbitario que va a penetrar por el agujero infraorbitario va a salir, perdón, va a penetrar por el agujero maxilar para distribuirse por dentro del canal infraorbitario y emerger por el agujero infraorbitario para recoger la sensibilidad del labio superior y el nervio pterigopalatino. Este nervio pterigopalatino lo podemos ver dividido en tres ramos. Un ramo muy pequeño que se dirige hacia el paladar blando que es el nervio palatino menor, un ramo de mayor tamaño que va a recoger la sensibilidad del paladar duro que es el nervio platino mayor y un último nervio que va penetrando hacia la cavidad nasal que es el nervio nasal caudal.