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Una vez estudiados los cartílagos de la laringe  en el caballo vamos a hacer algunas referencias   comparativas en los cartílagos de las otras especies. En esta reparación tenemos plastinados los cartílagos pertenecientes a la especie bovina. En cuanto a las diferencias más apreciables podemos observar que las dos láminas del cartílago tiroideo son mucho más amplias que las del caballo y, por lo tanto, prácticamente en esta especie no se describe esa escotadura que describíamos en el caso del caballo. Y la unión de las mismas, lo que es la prominencia laríngea se produce en una posición mucho más caudal. Observamos también como este cartílago en esta especie, sus láminas se proyectan en las dos astas tiroideas pero con un notable desarrollo caudal del asta tiroidea caudal que se articula con el cartílago cricoides. Recordar que respecto al cartílago epiglótico en esta especie no se describen las apófisis cuneiformes que desde la base accedían al pliegue ariepiglótico en el caballo. En el caso del cerdo podemos apreciar que también  las láminas del cartílago tiroides son bastante   anchas como las del vacuno. Se describe de una  manera más roma lo que es el asta tiroidea caudal   pero a diferencia de las otras especies y como se  puede observar en esta preparación no se describe   o no existe en esta especie el asta tiroidea  rostral. Por otra parte, en relación a lo que es el   cartílago aritenoides podemos observar que los  tubérculos corniculados o apófisis corniculadas en esta especie son dobles. En relación a la laringe del perro, en esta preparación vemos cómo se articula con el tirohioides para engarzar con el aparato hioideo. Podemos apreciar la conformación del cartílago tiroideo con sus dos láminas, también bastante anchas, un buen desarrollo de lo que es el asta tiroidea rostral y del asta tiroidea caudal que se articula con el cartílago cricoides y la principal diferencia la encontramos  aquí ,en relación con el cartílago aritenoides   puesto que en esta especie, ese cartílago no  solamente va a disponer de los dos tubérculos o   apófisis corniculadas sino también va a incorporar las dos apófisis cuneiformes. Recordemos una vez más que estas apófisis existen en el caballo pero dependientes del cartílago epiglótico.