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Para la evaluación del sediemnto urinario vamos a llenar un tubo cónico con nuestra muestra de orina. Para ello llenamos el tubo hasta la última línea del mismo. A continuación lo situamos en la centrífuga. Como sólo tenemos una muestra, la centríuga tiene que estar equilibrada con otro tubo con características similares al de nuestra muestra de orina, es decir, el mismo volumen. Lo situamos justo enfrente del tubo que hemos puesto previamente A continuación cerramos la centrífuga y colocamos la velocidad a 1.000 g 00:01:33,760 --> 00:01:36,360 Transcurrido el tiempo correspondiente, abrimos la centrífuga. Sacamos nuestro tuvo con la orina centrifugada y, a continuación, eliminamos el sobrenadante con mucho cuidado de no introducir aire en el interior de la muestra. Eliminamos ese sobrenadante hasta la última línea del tubo. A continuación homogeneizamos la muestra y le añadimos un colorante para visualizar mejor las estructuras del sedimento. Para ello, cogemos 50 microlitros del colorante y lo mezclamos con el sedimento que hemos obtenido previamente. Y volvemos a homogeneizar. Una vez tenemos preparada la muestra, cogemos un porta y colocamos una gota de nuestra preparación en dicho porta. Finalmente, situamos un cubreobjeto encima de la muestra y evaluamos bajo el microscopio.